Detener el crecimiento, alterar el metabolismo y afectar la función de órganos internos son algunos riesgos asociados al uso de esteroides anabólicos.
En la adolescencia, el proceso de crecimiento y pubertad suscita inquietudes acerca del desarrollo físico, la contextura corporal e incluso el rendimiento deportivo, especialmente en contextos donde se busca destacar o alcanzar el alto rendimiento. En ocasiones, esta situación lleva tanto a los adolescentes en crecimiento como a sus padres a buscar métodos que proporcionen un avance rápido y visible con ayudas sintéticas basadas en hormonas. Entre estas ayudas se encuentran los esteroides, conocidos por sus efectos en el aumento de la resistencia física, fuerza y condiciones deportivas mejoradas.
Los esteroides son medicamentos que se clasifican en corticosteroides (recetados para controlar enfermedades como el asma y el lupus) y esteroides andrógenos anabolizantes (EAA) o anabólicos, hormonas sintéticas utilizadas para aumentar la capacidad de fabricación de tejido muscular (musculación) en el cuerpo.
Los EAA son compuestos sintéticos relacionados con las hormonas sexuales, derivados de la testosterona, que según el endocrinólogo William Rojas, médico adscrito a Colsanitas, se emplean en ciertos contextos clínicos para tratar anemias y problemas de masa ósea en personas mayores de 65 años o mujeres menopáusicas. “Sin embargo, también se han popularizado en el ámbito estético, especialmente en el mercado negro y en centros de belleza corporal, donde se promueve su consumo como método para aumentar la masa muscular”, explica.
El consumo de esteroides anabólicos en adolescentes, especialmente cuando no han alcanzado su estatura final, puede acarrear graves consecuencias para su salud. Según el doctor Rojas, "el cartílago de crecimiento, esencial para el crecimiento en altura, se ve perjudicado significativamente por el uso de esteroides, lo que puede resultar en una detención prematura del crecimiento, ocasionando una pérdida permanente de estatura y otros problemas de salud a largo plazo".
Por esta razón, diversos organismos gubernamentales y de salud a nivel mundial han establecido estrictas regulaciones y controles de verificación del acceso a los esteroides para que su obtención no esté permitida sin prescripción médica.
La Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA) de los Estados Unidos señala que las etiquetas de algunos esteroides recomiendan medir los niveles hormonales durante su uso. Sin embargo, el problema trasciende porque algunos productos, como suplementos deportivos o alimentarios, podrían incluir de manera ilícita esteroides o sustancias similares sin que esta información aparezca declarada en la etiqueta de ingredientes.
El doctor Rojas señala que esta problemática, aunque es mediática, está vinculada a un mercado negro en el que se obtienen recetas médicas, buscadas en muchas ocasiones por los padres, desencadenando todo un comercio por internet en el que se venden esteroides, con gran probabilidad de que sean falsificados y contengan sustancias tóxicas añadidas.
Riesgos para la salud
Además de los riesgos en el desarrollo físico, el consumo de esteroides anabólicos puede tener efectos adversos en el metabolismo y los órganos internos. En hombres, puede causar disminución del volumen testicular e infertilidad, mientras que en mujeres puede provocar la interrupción del ciclo menstrual, alteraciones en la fertilidad y problemas óseos.
Efectos secundarios como la pérdida de estatura son irreversibles, mientras que otros, como la disfunción hepática, pueden mejorar con el tiempo después de suspender el uso de esteroides. El consumo recurrente de esteroides anabólicos puede desarrollar otros efectos adversos, entre ellos:
- Retraso en el crecimiento durante la adolescencia
- Agrandamiento excesivo de los músculos cardíacos
- Problemas en los lípidos en la sangre
- Acné
- Crecimiento mamario en los adolescentes
- Propensión a la caída del cabello en mujeres o calvicie en los hombres
- Crecimiento del vello facial y corporal en mujeres
- Cambios en el tono de la voz
Alternativas saludables
El doctor Rojas destaca que el ejercicio de fuerza es una de las formas más efectivas para aumentar la masa muscular de manera natural. "Un plan de entrenamiento adecuado, guiado por un médico deportólogo, puede ayudar a desarrollar una musculatura fuerte y bien definida. Es importante recordar que la constancia y el esfuerzo son clave para lograr resultados duraderos", añade, haciendo énfasis y un llamado a considerar el crecimiento del cuerpo como un proceso inalterable, pues el organismo lo reconocerá y tendrá sus efectos.
Más allá de soluciones rápidas y artificiales, la clave para aumentar la masa muscular de forma saludable está en el ejercicio adecuado, la alimentación balanceada y el acompañamiento de profesionales de la salud. El esfuerzo y la dedicación en la actividad física, junto a una dieta equilibrada, son la mejor manera de alcanzar resultados satisfactorios y duraderos para una vida plena y saludable.
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