Con la llegada del nuevo año algunas personas se proponen cambios en su régimen alimenticio. Hablamos con dos expertas para revisar cuáles son las mejores pautas a la hora de hacer este cambio.
Una transformación en la dieta de una persona es un cambio que atraviesa diferentes ámbitos de la vida, no solo la alimentación. La comida está fuertemente ligada a nuestros vínculos sociales, a las emociones, a las dinámicas de la cotidianidad. Por eso cambiar la dieta para migrar hacia el vegetarianismo es un paso que debe transitarse con mucha conciencia y , por tratarse de un impacto en el cuerpo y el organismo, lo mejor es hacerlo de la mano de profesionales de la salud.
Carolina Pinzón es coordinadora de nutrición de la Clínica Universitaria Colombia. Para ella es clave recordar que la fuente de proteína de mejor biodisponibilidad (proporción de un nutriente presente en un alimento, que es digerido y utilizado por el organismo) se encuentra en los tejidos animales, al igual que el hierro y la vitamina B12. Así que reemplazar estos nutrientes con proteína que no proviene de animales debe ser una tarea consciente y responsable.
Lo más importante a la hora de hacer este cambio es evitar un desbalance nutricional por eso la persona debe acudir donde el profesional en nutrición que guíe esta nueva práctica y recordar que ningún régimen alimenticio por sí solo genera un beneficio. Debe estar acompañado de otras prácticas saludables.
Paola Duarte es médica y junto a Diego Porras son los propietarios del restaurante vegano y vegetariano Veggie beans, ubicado en el barrio Chapinero, en Bogotá. Conocen muy bien los alimentos que deben integrarse en una dieta vegetariana y recalcan la importancia de hacer estos cambios de manera paulatina. Estos son sus consejos para quienes quieren cambiar sus hábitos alimenticios al vegetarianismo:
- Lo primero que hay que hacer es desligarse de las carnes rojas porque es la proteína que necesita de más componentes para metabolizarse.
- Suplementar los nutrientes que aporta la carne con leguminosas como el frijol, el garbanzo y la lenteja. La soya también es una de las mejores fuentes de proteína de origen vegetal, al igual que los champiñones y los alimentos de color rojo que contribuyen al buen funcionamiento de la sangre.
- Evitar los embutidos pues estos alimentos contienen muchos aditivos, sal y químicos que no tienen ningún aporte nutricional.
- No dejar de repente todas las carnes. La transición debe ser gradual, puede dejar todas las carnes pero no el pescado, por ejemplo. Este es el que más rápido se metaboliza y contiene muchos nutrientes.
- El cambio de hábitos es suyo y es importante para usted, por eso no debe convencer a sus allegados de hacer lo mismo. En nuestra cultura y costumbres ha sido preponderante el consumo de carne así que es común que algunas personas vean su decisión como algo descabellado o muy raro. Tenga paciencia, preocúpese por su proceso y actúe amorosamente con quienes están a su alrededor.
- En ocasiones una persona se cansa porque las opciones a la hora de comer vegetariano parecen reducidas o no se parecen a lo que comía antes, por eso es necesario explorar recetas, inspirarse e intentar cosas nuevas.
*Editora de Bienestar Colsanitas.
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