Ser mamá en dos idiomas
Una familia que creía estar enfrentando una barrera idiomática, pero que en realidad se encontró con uno de los mejores viajes de su vida.
Un verano sin leche
Dejar de tomar leche ha sido una revolución profunda en mi vida. ¿Quién iba a pensar que ese líquido cremoso era la clave para romper patrones de crianza?
Le cogí el tiro al amor propio
Después de pegarme una patoneada por el camino que conduce a la autoestima, estoy lista para ahorrarte tumbos y contarte cómo creo que es la vuelta.
Bailar en un geriátrico
Pasé de tenerle pánico a la vejez a aprender de un hogar para ancianos. Hoy agradezco a mi suegra porque las sombras de su memoria le han dado luz a mi...
Necesitaba desahogarme
No hay nada más riesgoso que ventilar desacuerdos con el mundo. E igual, presiento que vamos a estar de acuerdo en varios puntos que dejo acá.
Primípara a los 42
La verdad es que cuando salí del colegio, no elegí la carrera que realmente quería. Hoy, a pesar de mis preocupaciones, retorno a las aulas para...
Victoria sobre la muerte
Yo pensaba que tenía las preguntas alrededor de la muerte solucionadas, hasta que me llegaron varios duelos. Ahora mi perspectiva es otra.
Un vientre vacío
La historia de cómo mi anhelo más profundo se convirtió en una pesadilla tremendamente dolorosa. Dedicado a mi hija.
Lo mejor que le pasó a mi empresa fue mi divorcio
Después del baldado de agua helada de un divorcio, todo se puede derrumbar… a menos de que tengas una convicción y otro amor (propio) que te saque renovada.
Sálveme quien pueda
Durante muchos años pensé que mis hábitos y emociones nunca estarían involucradas el crecimiento personal… ahora nadie me saca de ahí.
Mi terquedad me trajo la felicidad
Dejé todo para construir mis sueños y en el camino casi los pierdo. Cuando elegí desde el amor logré reencontrarme a mí y reunirme con el ser que más...
20 años de relación se acabaron, ahora estoy en las apps de citas
Veía las apps de citas como espacios para gente incapaz de conectarse en la vida real. Ahora, a mis 46 años, después de separarme, entendí lo poderosas que...
No me contrataron para hacer amigos
El mundo corporativo puede ser un campo de desarrollo, pero también de encuentros del tercer tipo. Nos podemos topar con seres que ponen a prueba lo que...
Todo es ruido
Un día común, el mundo definiría a mi hijo como autista sin entender totalmente la palabra. Mientras, él me enseña a ponerle andamios a la neurodiversidad.
Elegí ser ama de casa y no me arrepiento
Una de las diferencias entre una mujer que trabaja, con un horario, y otra que se encarga de sus hijos y su esposo, es la calidad de tiempo familiar.
Soy mamá de una adolescente
Decir que esta fase de la maternidad es una montaña rusa, se queda corto. Mientras ella crece, yo envejezco, pero no lo cambiaría por nada en el mundo.
La moda es mi armadura
El mundo de la alta costura tendrá su lado polémico, y hasta sus tendencias tiránicas, pero a través de él descubrí mi propia belleza y también el ser...
Me paraliza la inseguridad
He dejado pasar oportunidades laborales, relaciones amorosas y hasta saltos a la fama. Pero aquí voy, a punto de contarlo todo.
Vencí el miedo a vivir sola en otro país
Aunque no fue fácil, pandemia incluida, logré cumplir, después de los 30 años, mi sueño laboral. Acá mi historia de migración bonaerense.
Me alimento de recuerdos
Soy nostálgica. Procuro no borrar recuerdos y, cada mucho, vuelvo a los que se diluyen. Hoy me aferro a la primera gran amistad que me dio la maternidad.
Del éxito y otros demonios
Había pasado años estudiando, título tras título, idioma tras idioma, y certificado tras certificado. Por algo, seguía sin tener éxito y no entendía por...
Ser una mamá vieja
Fui madre por primera vez a los 38 años y luego repetí a los 42. Siento el cansancio de la crianza, pero he aprendido a verle el lado bueno a la situación.
Un año conversando con ustedes
En abril del año pasado se abrió este espacio. Acá un tributo a las publicaciones, a las autoras y a cada lectora que le da propósito a La Conversación.
Soy una control freak
Es una tara, pero es quien soy. Acá confieso que ni siquiera a miles de kilómetros de mi casa soy capaz de ceder el control.
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