¿Qué tanto tiene que ver la alimentación en la aparición del acné? ¿Se puede tratar el acné con dieta? Consultamos a dos especialistas.
l acné es una enfermedad inflamatoria genética que compromete la unidad folicular de la piel. Sin embargo, hay múltiples factores externos e internos que pueden incidir en su aparición y en su severidad”, explica la doctora Astrid Lorena Ruiz, dermatóloga de Colsanitas. En ese orden de ideas, “aunque los hábitos alimenticios no son una causa directa del acné, el consumo de ciertos alimentos sí puede empeorar la condición en quienes ya lo padecen”, puntualiza.
La doctora Carolina Cabrera, dermatóloga de la Universidad del Bosque, coincide con este punto: “algunos alimentos tienen la capacidad de estimular la producción de andrógenos y factor de crecimiento similar a la insulina, y esto puede tener una influencia en el curso del acné. Ojo: esto no quiere decir que una dieta estricta vaya a curar la enfermedad”, enfatiza la doctora Cabrera.
* Ilustraciones por Mariana Sanín. Instagram: @mariana_sanin.
Alimentos que pueden agravar el acné
Para la doctora Ruiz, están todos aquellos que tienen un alto índice glucémico o IG. El IG es la cantidad de tiempo que le toma a un alimento elevar los niveles de azúcar/glucosa en la sangre. Entre estos alimentos están:
Lácteos: leche, queso, mantequilla...
Productos procesados y refinados: panadería industrial, embutidos, bebidas azucaradas.
Harinas, panes y arroz blanco.
Grasas saturadas: helados, golosinas industriales en paquete.
Alimentos que pueden moderar los síntomas del acné
Aquí la palabra mágica es antioxidantes. “Estos nos ayudan a tener un cutis sano pues disminuyen la inflamación de la piel, del intestino, del organismo en general, y contribuyen a revertir el daño oxidativo”, explica la doctora Carolina Cabrera.
Por su parte, la doctora Ruiz indica:
Existen vitaminas antioxidantes como la A, E, C y D que están presentes en muchas frutas y verduras, y que se recomiendan para tener una piel saludable. Algunos alimentos ricos en estas vitaminas y antioxidantes son: la manzana verde, la sandía, el melocotón, la naranja, la granada, las frambuesas, los arándanos, los tomates, la uchuva, la zanahoria y el brócoli.
Hay otro tipo de antioxidantes como quercetina, resveratrol, licopeno, flavonoides y todo tipo de polifenoles. Algunos alimentos ricos en estos componentes son las uvas, las cerezas, el apio, el perejil, el chocolate amargo, el té verde y el café.
También son importantes para la piel los minerales como el cobre —presente en legumbres, cereales integrales y frutos secos—, el magnesio —presente en espinacas, almendras y edamames—, el calcio —acelgas, nueces, legumbres, vegetales de hojas verdes— y el fósforo —arroz integral, avena, semillas y nueces.
* Periodista. Tiene un posgrado en Nutrición de la Universidad de Barcelona. Instagram: @Lacucharadecata.
¿Funcionan las mascarillas caseras?
La respuesta es no, dice la doctora Ruiz. “El acné no se resuelve con la aplicación de alimentos en forma de mascarillas”. Podría ser incluso más útil comerse las frutas y verduras ricas en antioxidantes, vitaminas y minerales. La doctora Cabrera concluye: “no existen estudios clínicos que demuestren la eficacia de aplicar estos alimentos en nuestra piel. Los productos dermocosméticos son creados en laboratorios con principios activos a concentraciones óptimas que aseguran su adecuada penetración y eficacia, por eso superan en eficacia a los productos caseros”.
Algunos datos de interés
En Colombia, se calcula que antes de los 21 años, entre el 80 y el 90 % de los adolescentes y adultos jóvenes han padecido de esta enfermedad, aunque sea de forma leve.
El acné puede persistir después de los 21 años y, aproximadamente, el 12 % de las mujeres mayores de 25 años todavía sufren de acné facial.
Según una encuesta realizada en 2019 por la Asociación Colombiana de Dermatología y Cirugía Dermatológica, Asocolderma, el 53 % de las personas entrevistadas frente a un caso de acné se automedica o consulta fuentes sin formación médica.
El tratamiento para el acné incluye medicamentos tópicos y sistémicos, por eso lo mejor siempre será acudir a un especialista para que oriente cada caso de manera particular.
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