En Colombia hay 509 especies introducidas o no nativas, de éstas 22 han sido declaradas invasoras por los impactos potenciales y reales que pueden causar en los ecosistemas. Aquí describimos las diez especies invasoras más representativas presentes en el país.
Las especies introducidas o no nativas son registradas y estudiadas con el fin de aportar evidencia sobre los impactos potenciales y reales de esas especies en los ecosistemas. El Ministerio de Ambiente y Desarrollo Sostenible se basa en esos análisis para declarar a las especies como invasoras, bien sea de fauna o de flora.
Las especies invasoras son aquellas que tienen la capacidad de adaptarse a ecosistemas diferentes al de su origen, lo colonizan para empezar a reproducirse con lo que provocan el desplazamiento de especies nativas, además de transmitir enfermedades y destruir hábitats, entre otros.
Juan Felipe Zapata, asesor científico del Consultorio Sociojurídico de Protección a los Animales de la Universidad de Antioquia, explica las características de las especies invasoras más representativas del país.
Caracol gigante africano
Achatina fulica
ORIGEN: África.
PRESENCIA EN COLOMBIA: llegó desde Brasil donde se le daba uso cosmético a la baba de caracol. Posteriormente, el tráfico de esta especie fue muy popular para comercializarse como mascota.
PRINCIPALES IMPACTOS: deteriora los ecosistemas, es predador de caracoles nativos y afecta los cultivos de frutas, vegetales y leguminosas. Fue incluido en la lista 100 de las especies exóticas invasoras más dañinas del mundo de la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza.
DECLARADA INVASORA: 2011.
Hipopótamo
Hippopotamus amphibius
ORIGEN: África subsahariana.
PRESENCIA EN COLOMBIA: introducida al país por Pablo Escobar para hacer parte de un zoológico privado en la Hacienda Nápoles, Antioquia. La expansión de la especie no fue controlada y actualmente hay 130 hipopótamos en el país.
PRINCIPALES IMPACTOS: afectan la estructura física y química del ecosistema, perjudican las fuentes hídricas y, en consecuencia, a las especies que habitan estos ecosistemas.
DECLARADA INVASORA: 2022.
GARZA BUEYERA
Bubulcus ibis
ORIGEN: África, Asia y Europa.
PRESENCIA EN COLOMBIA: es un ave migratoria que se adaptó en América.
PRINCIPALES IMPACTOS: generan conflictos socioeconómicos por la afectación de cultivos y porque pueden hospedar virus que enferman al ganado. Además, pueden afectar a las especies nativas porque se alimentan de insectos, ranas, moluscos y ratones, entre otros.
DECLARADA INVASORA: 2005.
GECKO DE FLORIDA
Sphaerodactylus notatus
ORIGEN: Bahamas, Cuba y Estados Unidos.
PRESENCIA EN COLOMBIA: se reportó por primera vez en Estados Unidos a mediados del siglo XIX. Es una especie amenazada por el biocomercio para ser utilizada en el país como animal de compañía. PRINCIPALES IMPACTOS: es una especie territorial que tiene una alta tasa de reproducción y puede ser predadora de especies nativas.
DECLARADA INVASORA: 2011 (riesgo moderado)
DRAGÓN BARBUDO
Pogona vitticeps
ORIGEN: Australia.
PRESENCIA EN COLOMBIA:llegó al país para la comercialización de la especie como animal de compañía. PRINCIPALES IMPACTOS: no hay impactos demostrados en Colombia, pero debido a que sí los hay en países vecinos, Colombia tomó medidas con base en estudios extranjeros. Según las investigaciones, esta especie es predadora de insectos, lagartijas y podría representar un riesgo para los cultivos.
DECLARADA INVASORA: está en la lista de especies potencialmente invasoras desde 2011.
COQUÍ ANTILLANO
Eleutherodactylus johnstonei
ORIGEN: Islas del Caribe.
PRESENCIA EN COLOMBIA: hay registros en América desde inicios del siglo XX. Debido a la comercialización de plantas, la especie se transportó en los barcos mercaderes de la época. Llegó desde Venezuela a Colombia.
PRINCIPALES IMPACTOS: su distribución es amplia sin importar si el ambiente es seco, salado o húmedo. Se adapta a muchos ecosistemas, degrada cultivos agrícolas y ayuda a transmitir enfermedades infecciosas de ranas nativas.
DECLARADA INVASORA: está en la lista de especies potencialmente invasoras desde 2008.
PEZ LEÓN
Pterois volitans
ORIGEN: Océano Índico tropical y Pacífico occidental.
PRESENCIA EN COLOMBIA: su introducción se dio por el escape de algunos individuos de unos acuarios en Florida, Estados Unidos. Posteriormente se propagaron a las islas del Caribe, Costa Rica, México, Bélice, Honduras y Colombia, entre otros.
PRINCIPALES IMPACTOS: afecta los ecosistemas acuáticos, su dispersión a gran escala lo posiciona como depredador de 167 especies; no tiene depredadores naturales, generando un impacto ambiental y socioeconómico.
DECLARADA INVASORA: 2010.
LANGOSTINO TIGRE
Penaeus monodon
ORIGEN: Océano Índico y Pacífico occidental y central.
PRESENCIA EN COLOMBIA: llegó al país intencionalmente por intereses económicos y gastronómicos.
PRINCIPALES IMPACTOS: debido a su reproducción a gran escala, genera contaminación ambiental al hospedar virus que afectan la diversidad nativa y el comercio de peces, langostas, camarones de agua dulce y cangrejos.
DECLARADA INVASORA: 2010
GECKO LEOPARDO
Eublepharis macularius
ORIGEN: Medio Oriente.
PRESENCIA EN COLOMBIA: introducida al país para la comercialización de la especie como animal de compañía.
UBICACIÓN: no hay evidencia de su distribución porque es una especie contenida (en cautiverio), por su comercialización se encuentra en las principales ciudades del país.
PRINCIPALES IMPACTOS: por no tener controladores biológicos, podrían poner en riesgo la salud de los ecosistemas y las especies nativas.
DECLARADA INVASORA: 2008.
RANA TORO
Lithobates catesbeianus
ORIGEN: Canadá, México y Estados Unidos.
PRESENCIA EN COLOMBIA: fue introducida desde Brasil para promover la industria de la zoocría.
PRINCIPALES IMPACTOS: es hospedadora de enfermedades que afectan especies de anfibios nativos, ocasionando la disminución y extinción de poblaciones. También, es predadora de otras especies de anfibios.
DECLARADA INVASORA: 2008.
¿Qué se puede hacer?
Colombia ha sido cuidadosa en sus políticas ambientales por la megadiversidad y fragilidad de sus ecosistemas. Sin embargo, las medidas de prevención para evitar que muchas especies de fauna exótica entren al país no han sido del todo efectivas. Cuando estas especies ingresan a Colombia, se deben ejercer medidas de vigilancia y control, de acuerdo con el Ministerio de Ambiente.
Causas de la presencia de especies invasoras en Colombia
• Intereses comerciales.
• Fenómenos de migración dados por las altas tasas de reproducción y por el desplazamiento de las especies por conflictos humanos, hábitats destruidos y el cambio climático.
Medidad de vigilancia
Hacer seguimiento a la especie con detecciones tempranas y la implementación de estrategias para impedir su expansión, como el ingreso de la especie a zoológicos.
Medidas de control
Se utilizan para que haya una población ambientalmente aceptable y así los impactos sean menores.
• Control químico: impide la propagación de la especie con químicos que ayudan al proceso de esterilización.
• Físicos y mecánicos: se realizan por medio de brigadas para extraer manualmente la especie y posteriormente sacrificarla. Este proceso de sacrificio lo realizan las instituciones ambientales, que garantizan que el animal no sufra durante el procedimiento.
• Control biológico: se introducen a los predadores de la especie para hacer el control biológico, es utilizado en su mayoría para controlar insectos y plantas.
• Erradicación: eliminación completa de la especie por medio del sacrificio o la extracción.
Glosario
• Fauna silvestre: propia del territorio.
• Fauna exótica: fauna de otros ecosistemas o ambientes que se introduce al territorio nacional. No toda fauna exótica es invasora.
• Especie introducida: aquella que de manera accidental o deliberada es introducida en un nuevo ecosistema.
• Especie establecida: especie que logra crear una población que se autosostiene, se adapta y reproduce, estableciendo una comunidad en el nuevo territorio.
• Especie invasora: especies de fauna exótica que se adaptan, se reproducen a gran escala y desplazan de su hábitat a otros organismos. Puede ser un potencial riesgo para los ecosistemas nativos.
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