Mantener alineados cabeza, cuello y columna es la principal función de la almohada. Pero hay que escoger la que mejor se adapte a sus necesidades.
Tener la almohada adecuada es garantía de un descanso reparador y de calidad. Se subestima a veces su importancia, pero lo cierto es que tener un soporte correcto para el cuello y la cabeza
permite aliviar la presión sobre la columna y lograr una distribución equitativa del peso del cuerpo mientras dormimos.
Carla Hidalgo, fisioterapeuta de la Clínica Reina Sofía de Colsanitas, dice que cuando la persona se acuesta bocarriba y pone una almohada debajo de las rodillas contribuye con la reducción del peso que debe soportar la columna durante el tiempo en reposo. Si duerme de medio lado, una almohada ubicada entre las rodillas ayuda a aliviar la tensión en la zona lumbar. Y si la persona duerme bocabajo, es recomendable poner la almohada en el bajo vientre, de tal manera que se minimice la curvatura de la columna y el cuerpo se relaje más.
“Son recomendaciones generales que pueden tener incidencia en el buen dormir, pero son aún más pertinentes cuando la persona tiene algún tipo de necesidad especial, como una cirugía de reemplazo articular o lesiones de la columna vertebral. En estos casos, hay que ayudar a mantener la curvatura fisiológica natural del cuerpo, y eso puede ser con una almohada o con un rollo de tela que haga el mismo trabajo”, dice la fisioterapeuta Hidalgo.
Casos especiales
- Para las embarazadas, o en el caso de personas que se han sometido a cirugías en la zona abdominal, la almohada puede ser muy útil, tanto para el control del peso de la barriga de la gestante como para disminuir la tensión en los músculos próximos al área intervenida.
- En los bebés, su uso está indicado para evitar reflujos.
- Para quienes padecen apnea del sueño, se recomienda una almohada o cojín de unos 30 centímetros de alto para mantener despejadas las vías aéreas.
Consideraciones antes de comprar una almohada
La almohada ideal para cualquier persona no existe, pero hay varias características para tener en cuenta al momento de escogerla.
- Tamaño: el ancho de la almohada debe ser siempre superior al de los hombros. Y el espesor, o la altura, regularmente varía entre 10 y 15 centímetros. Pero la mejor opción dependerá del gusto y las características fisonómicas de cada persona.
- Relleno: las de plumas de pato son muy suaves y ligeras, se deforman con facilidad pero rápidamente vuelven a su forma inicial y son recomendables para quienes suelen dormir bocabajo. Las de látex sintético o natural son firmes y se adaptan con facilidad a la curvatura del cuello, son las mejores para personas de contextura gruesa.
Las sintéticas de fibra de poliéster tienen muy buena adaptabilidad pero son de vida corta porque con el tiempo se deforman. Y las de espuma de poliuretano tienen la propiedad del efecto memoria (memory foam), puesto que se “acomodan” a la curvatura entre cabeza y cuello y proveen buen soporte; son ideales para quienes duermen de lado, aunque pueden ser costosas.
- Higiene: se recomienda airear habitualmente las almohadas para evitar que concentren olores desagradables, darles vuelta con frecuencia para que no se deformen, lavarlas un par de veces al año y siempre usar fundas de protección además de la funda que viene con el juego de sábanas.
En caso de ser alérgico a los ácaros, hay que tener en cuenta que las fundas de algodón percal o seda ayudan a combatirlos, igual que los rellenos como la espuma viscoelástica y el látex.
Viaje cómodo
Un accesorio de viaje muy útil para servir de soporte a la cabeza y el cuello durante las horas que pasamos en un carro, bus o avión, es la almohada de viaje (cojín en forma de U que se pone alrededor del cuello). Los hay de varios tipos, rellenos de material viscoelástico, microesferas de poliestireno expandido (icopor), tela, algodón o los que se inflan con aire. La fisioterapeuta de Colsanitas advierte que los inflables son demasiado rígidos para cumplir con su función ergonómica, por lo que vale la pena explorar las demás opciones según su gusto.
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