Con amor, apoyo familiar y acompañamiento profesional se puede lograr un estado físico y mental saludables.
La época en la que se debía guardar una “dieta” de 40 días tras un parto, en cama y aislada de toda actividad física o social es cosa del pasado. De acuerdo con las recomendaciones de los especialistas, no se trata de encerrarse, pero tampoco de dejar a un lado el cuidado de su salud física y mental.
La doctora Patricia Valencia, médica ginecóloga, cuenta que “existen dos extremos frente a la recuperación de una mujer después del parto: las que quieren tener el cuerpo perfecto en tres días y buscan lograrlo con cirugías o tratamientos invasivos, y las que se olvidan que existen y se abandonan”. Frente a esto, la doctora Anyhely Bustos, ginecóloga y obstetra adscrita a Colsanitas, explica que “cualquier extremo es malo; se trata de volver a un cuerpo, un peso y un estado mental saludables que le permitan cuidar de su hijo, pero también de sí misma, con apoyo familiar”.
De todas maneras, la denominada etapa del puerperio, periodo que va desde el momento inmediatamente posterior al parto hasta los 35-40 días, es un tiempo fundamental para recuperar progresivamente las características que se tenían antes de iniciar el embarazo, para organizarse en torno a su bebé y a ella misma.
Cambios visibles
Quizás la preocupación más común en las mujeres que acaban de tener un hijo es su peso. Sin embargo, la grasa abdominal que el cuerpo de la embarazada desarrolla para soportar el peso del bebé es normal, explica el cirujano plástico Esteban Jaramillo.
Lo mismo sucede con los kilos que durante los nueve meses van aumentando. De acuerdo con los patrones médicos, explica la doctora Bustos, una mujer debe subir, en promedio, de 10 a 12 kilos que van a disminuir paulatinamente con la lactancia, en la medida que el cuerpo vaya eliminando líquidos y que su actividad física se incremente.
La importancia del ejercicio
De acuerdo con una investigación realizada por la Universidad Complutense de Madrid, “el vínculo entre ejercicio físico y embarazo ha ido evolucionando y adaptándose a lo largo de la historia. En la actualidad existen muchos estudios que fundamentan la prescripción del ejercicio físico en las gestantes, asegurando mínimos riesgos y grandes beneficios”.
Durante el embarazo son muchos los cambios que experimenta una mujer, pero el ejercicio acompañado de una respiración profunda le ayudará a que no aumente de peso más de lo esperado, a generar endorfinas que le darán mayor bienestar, y a preparar su cuerpo para el trabajo de parto.
Esto, en otras palabras, demuestra que es posible recuperar el peso de forma natural, tan solo con una dieta balanceada, saludable y ejercicio funcional.
La psicóloga Sandra Alejo, educadora prenatal, explica que “las mujeres de hoy se preparan mejor antes y durante el embarazo y son conscientes de la necesidad de la actividad física recomendada”. Además, añade que “se puede volver a tener el cuerpo y el peso que se tenía antes del embarazo porque biológicamente el cerebro está dispuesto naturalmente para ello, lo único que necesita es amarse, protegerse y cuidarse”.
Caminar de forma consciente, durante el tiempo recomendado por un ginecólogo o especialista en cuidado pre y posnatal es una de las actividades más benéficas durante el embarazo, de lo contrario, comenta Sandra Alejo, el cuerpo se deteriora por la falta de movimiento.
El tiempo después de los 35-40 días del parto es fundamental para recuperar progresivamente las características que se tenían antes de iniciar el embarazo.
Después del parto
Después de dos semanas del parto puede comenzar a caminar en casa; a las tres semanas ya podrá salir a dar una vuelta con el coche, en compañía de su bebé; Inclusive puede retomar actividades como pilates o yoga, bajo supervisión profesional.
Ahora bien, estas recomendaciones se pueden seguir cuando el parto es natural, pues cuando se trata de una cesárea, es el médico quien debe hacer las recomendaciones pertinentes, de acuerdo con la evolución de la cirugía.
Como lo aclara la doctora Valencia, “no se trata de montarse en una bicicleta dos semanas después del parto, el ejercicio debe ser paulatino y recomendado por su médico, tampoco debe realizar esfuerzos físicos pesados”.
Recuperación emocional
El descenso hormonal tras el parto, las nuevas actividades con el bebé y el cansancio por la falta de sueño suelen acompañar a la mujer durante los primeros meses. Por ello es fundamental el acompañamiento del padre del bebé, quien, gracias a la licencia de paternidad aprobada recientemente en Colombia, puede estar en casa durante esas primeras semanas posparto.
“La mujer debe y necesita dejarse ayudar y delegar responsabilidades frente al cuidado del bebé. Por ejemplo, si tiene el apoyo de su pareja, la mamá o la suegra, es importante aprovechar los tiempos de sueño de su hijo para descansar ella también. Lo mismo para delegar trabajos u oficios”, dice Alejo.
“Lo que se necesita es un acompañamiento empático”, dice la ginecobstetra Anyhely Bustos, “la ayuda de las personas cercanas debe estar enfocada a que la mamá recupere su ritmo de vida y ellas deben entender que no lo pueden ni tienen que hacer todo” comenta.
Poco a poco, en los siguientes tres a seis meses, la práctica de actividades aeróbicas (correr, bailar, montar en bicicleta) no solo le ayudarán a continuar con el proceso de recuperación física, sino que le permitirán prevenir la depresión después del parto, gracias al aumento de las endorfinas que genera el ejercicio.
Por lo general, la recuperación tras un parto es un proceso que, como el embarazo, se da de forma natural. El cuerpo de la mujer y su cerebro están diseñados para ello y en esta medida, la recuperación de su figura, su peso y el estado de ánimo dependerán de su propia decisión. Un embarazo acompañado por una alimentación balanceada y saludable, más el ejercicio bajo parámetros supervisados, le ayudarán a tener un parto sin complicaciones y un posparto tranquilo, armónico y natural.
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