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Bienestar Colsanitas

Sonambulismo y otras parasomnias

Existe una predisposición genética a padecer trastornos del sueño, pero algunos desaparecen en la adultez.   

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uizás le haya pasado: dormir con alguien que en mitad de la noche se sienta en el borde de la cama y le habla a la pared. Es probable que no se entienda nada de lo que dice y que no responda cuando se le pregunta si le sucede algo. También puede pasar que luego de pronunciar palabras sin sentido durante unos segundos, se despierte con un aullido que salga de su propia boca.

Aunque parezca el comienzo de una película de terror, es un síntoma común de una de las parasomnias más frecuentes, la somniloquia. Esta se caracteriza por hablar mientras se duerme y se puede manifestar de diversas maneras. Los pacientes pueden emitir algunas palabras inconexas o ininteligibles, pero también pueden dar pequeños discursos. Además, es posible que el volumen de la voz varíe y en muchas ocasiones pueden manifestarse gritos que logran despertar al paciente. 

Otra parasomnia igualmente inquietante, aunque más conocida, es el sonambulismo. Según Rafael Lobelo, neumólogo especialista en trastornos del sueño, adscrito a Colsanitas, “la persona que sufre este trastorno puede levantarse de la cama, caminar por la casa y realizar actividades cotidianas como vestirse y comer”. Incluso se han reportado casos de personas sonámbulas conduciendo automóviles. “Aunque la persona tenga los ojos abiertos y pueda recibir sensaciones del exterior, no es consciente de lo que hace, por lo que la probabilidad de que tenga un accidente con escaleras y con los muebles del hogar son elevadas”, añade.

Otras menos conocidas son la parálisis del sueño, que ocurre cuando la persona se despierta durante la fase del sueño MOR (Movimientos Oculares Rápidos) y no puede moverse; y el trastorno conductual del sueño MOR en el que las personas hacen lo que están soñando, por ejemplo dar patadas y puñetazos. 

“Las parasomnias pueden aparecer en cualquier fase del sueño. Durante el sueño MOR, cuando existe mayor actividad cerebral, durante el sueño No MOR, cuando aún no hay parálisis muscular, e incluso poco antes de despertarnos o dormirnos”, explica el neurólogo Andrés Franco. Normalmente, estos trastornos duran pocos minutos y pueden presentarse de diversas formas. 

Parasomnias CUERPOTEXTOLas parasomnias son trastornos del sueño donde existe actividad motora y cerebral inusual mientras el afectado se encuentra dormido.

Otras parasomnias

Terrores nocturnos. Son muy comunes en niños de 4 a 8 años y se manifiestan como episodios de gritos, llanto, miedo intenso y agitación.

Bruxismo. Se cataloga como un movimiento involuntario de la mandíbula que hace chocar o apretar los dientes y produce lesiones en la dentadura. Es un trastorno de movimiento relacionado con el sueño y normalmente se presenta en pacientes que roncan o padecen apnea del sueño. 

Despertar confusional. Es un estado en donde existe desorientación de tiempo y espacio al momento de despertarse, por lo que la persona puede angustiarse o ponerse violenta.

Pesadillas. Se consideran una parasomnia cuando son recurrentes y afectan psicológicamente al individuo. Son comunes como efecto del síndrome por estrés postraumático.

Causas

Existe una predisposición genética a sufrir de parasomnias, por lo que tener familiares sonámbulos o con episodios de somniloquias aumenta la probabilidad de padecerlas. Cuando se trata de niños y adolescentes, las causas son generalmente estrés, ansiedad y privación del sueño, además de interrupciones en los horarios para dormir. Después de que el paciente entra en la adultez, normalmente estos trastornos desaparecen. “Las parasomnias en personas adultas son raras, menos del 3% de la población las padece”, dice Lobelo. Cuando esto ocurre y las alteraciones del sueño son continuas, las causas se amplían y se añaden otros trastornos como el alcoholismo y la adicción a las drogas. El consumo de fármacos como sedantes y antidepresivos también se relacionan con la raíz del problema. 

Según el psiquiatra Franklin Escobar, las parasomnias en adultos, sobre todo si son mayores, pueden ser fruto de un tumor cerebral o producto de otras enfermedades como la apnea del sueño, lo que significa que la respiración se detiene al dormir. 

Consecuencias

Aunque la mayoría de las parasomnias son inofensivas, podrían causar comportamientos peligrosos y posibles lesiones para el paciente o para las personas que viven en su entorno. Además, episodios frecuentes de actividad motora durante el sueño resultan en cansancio y somnolencia al despertar, factores que pueden disminuir la calidad de vida de las personas.

Recomendaciones 

Para Escobar, “la mejor manera de evitarlas es tener una buena higiene del sueño”. Eso significa tener horarios establecidos para dormir y evitar comer en exceso o hacer ejercicio antes de acostarse. Del mismo modo, es recomendable alejarse de las pantallas por lo menos una hora antes de irse a la cama. Si sufre alguno de estos trastornos que afectan su calidad de vida, lo recomendable es que acuda a un especialista. 


*Periodista de 
Bienestar Colsanitas

SEPARADOR

Esteban Piñeros Martínez

*Periodista, colaborador frecuente de Bienestar Colsanitas.