La belleza es un estado de ánimo

Patricia López Ruiz en 1986 se coronó Señorita Colombia y en 1991 fue la portada del primer número de Bienestar Sanitas. 25 años después, la reina mantiene su corona a fuerza de trabajo y perseverancia.

a reina dice, la reina opina, la reina aconseja, la reina, la reina. Patricia López Ruiz fue Señorita Colombia hace 30 años, en 1986, pero la gente sigue llamándola reina. Algunos oyentes de su programa Al fin de semana que transmite RCN, creen que ese es su nombre de pila: reina. A ella le agrada: “En Colombia la gente quiere demasiado a sus reinas. En esa época existía mucha mística en el reinado y ser Señorita Colombia era algo que inspiraba admiración y respeto. Y ese respeto uno lo tiene que mantener, y tener muy presentes los valores que significaban ser Señorita Colombia”.

En diciembre de 1991 Patricia López fue la portada del número uno de Bienestar Sanitas. La foto de Alejandro Manosalva muestra a la reina de belleza con su primer hijo en brazos. La imagen ilustra un artículo sobre la lactancia materna, y en los créditos se menciona al fotógrafo y a la modelo como colaboradores de La Liga de la Lactancia Materna.

Esa foto, enviada a su correo personal, la convenció. La reina aceptó hacer un espacio en su agenda llena de compromisos y trabajo para dar una entrevista: está agobiada por terminar todo para salir de viaje por tres semanas. Se reunirá con sus dos hijos, Nicolás y Maximiliano, para celebrar su cumpleaños en París.

De esa carátula y de la foto ella recuerda poco. Sabe, sí, que no vivía en Colombia sino en Francia, donde estudió y vivió por siete años, mientras estuvo casada. Regresó a Colombia cuando Nicolás, el bebé de la foto, tenía cuatro años. Lo que no le extraña es que haya sido para ilustrar un artículo sobre lactancia:

—Prediqué y practiqué la lactancia con mis dos hijos. A ambos los lacté hasta que cumplieron el año. Eso es mucho tiempo para una madre trabajadora y con muchas ocupaciones. Pero valió la pena porque ambos resultaron ser adultos muy sanos y saludables, y eso tuvo que ver.

¿Cómo la cambió la maternidad siendo tan joven?

Visto desde hoy me siento feliz de tener unos hijos tan grandes y poder seguirles el paso, disfrutar en este momento de dos adultos que son mi orgullo pero que además son mis amigos. Eso es muy lindo. Aunque fue muy duro en su momento.

Han pasado 30 años desde que se coronó...

Este año cumplí 30 años de haber sido Señorita Colombia y pienso que con trabajo todo se puede lograr. Si hoy estoy donde estoy es exclusivamente por mi perseverancia, mi tenacidad y mi capacidad de trabajo. Porque a las reinas de belleza se nos abren las puertas muy fácil pero una vez se abren hay que man- tenerse. Yo llevo 30 años dando lora, 30 años haciendo lo que me gusta, y es porque supe que las oportunidades hay que apro- vecharlas, pero también demostrar lo que uno es capaz de hacer a punta de trabajo, esfuerzo, sacrificio y persistencia.

¿Cómo ha hecho para mantener ese lugar?

 Siento que nos hemos encasillado mucho en que la mujer bonita es bruta o va a vivir de su belleza toda su vida. Uno puede vivir de la belleza un tiempo, mientras dure, pero es que la belleza no dura toda la vida. Y saldrán 27 más bonitas, entonces si lo único que tienes para demostrar o para realizar tu sueño es tu belleza, es un terreno demasiado inseguro. En cambio, si uno sabe lo que tiene, lo que es capaz de hacer, insisto, uno puede realizar todos sus sueños. Pero a uno los sueños no le tocan la puerta, ni lo llaman al celular. Eso no existe. La única manera de realizar los sueños es teniendo claro lo que uno quiere y trabajar por eso.

¿Qué es para usted la belleza?

Para mí la belleza es un estado de ánimo. Muchas veces me preguntan qué tengo, me ven radiante y no me he hecho nada, pero todo lo que uno siente, todo lo que uno tiene por dentro se refleja en la seguridad, en la energía, en su carisma, en el genio, en la sonrisa. La sola sonrisa es un reflejo de la belleza que uno tiene por dentro. Me ha pasado en momentos duros y difíciles: que uno como que no trasciende, en cambio en los momentos en que más feliz estoy, me preguntan qué me hice. Y es porque la tranquilidad y la felicidad se reflejan en los ojos y en la sonrisa. Ahí es donde se ve la belleza.

¿Qué hace para mantenerse saludable y activa?

De todo. Hago mucho ejercicio. Me gusta mucho bailar. Tengo una profesora de baile que va a mi casa dos o tres veces por semana. Es el ejercicio que más me gusta. Trato de comer sano. Me encanta comer pan, tomar vino, pienso que la vida es demasiado cortica para no comer pan ni tomar vino. Pero si uno come eso entonces toca hacer ejercicio. Se trata de compensar. Me gustan los helados pero no como todos los días. Es como una cuenta corriente: lo que pones y lo que sacas tiene que ser equivalente para tener un balance positivo.

¿Cómo se lleva con la edad?

La próxima semana cumplo 49 años y me voy de viaje a celebrarlo con mis hijos. Hace mucho que no la paso con ellos porque son ciudadanos del mundo. Yo en mi cabeza me creo todavía como de 21, no tengo limitaciones de nada. Ni me quito años ni me siento avergonzada por tener los años que tengo. Todo lo contrario, me siento orgullosa porque a los 49 me siento más productiva que nunca, con más energía, más feliz y tranquila. No sé si sea más bonita o menos bonita pero me miro al espejo y me veo regia. Para la edad que tengo estoy regia. Entonces no pienso mucho en el número, en la cédula.

"Me gustaría aprender italiano o estudiar historia del arte..."

Le gusta mucho la cocina, ¿Cómo define esa faceta?

Me gusta mucho la cocina saludable. Tratar de hacer las mismas recetas que cocinamos todos los días pero quitándoles grasa, poniéndole ingredientes que sean saludables. Cocinar me parece el plan más rico de la vida, el más tranquilo y el que más me desestresa.

¿Qué más hace en su tiempo libre?

Cada vez tengo menos tiempo libre. Trabajo los siete días de la semana. Pero cuando tengo tiempo me gusta hacer ejercicio al aire libre, me gusta salir a caminar o a correr al parque. Me gusta pasar tiempo con mis hijos, con mi familia, con mis amigas. Tengo un millón de amigas y me fascina pasar tiempo con ellas. Soy gocetas por naturaleza entonces disfruto todo: ir a un cine, cocinar, viajar, ir a un restaurante, me fascinan los restaurantes entonces todos los nuevos los visito porque me gusta explorar cosas nuevas.

 ¿De qué cualidad le gusta presumir?

Autenticidad. Yo soy auténtica. Lo que ves es lo que hay. Si me gustas te amaré y si no, te darás cuenta. Soy como me ves, sin pose. Siempre he sido así y creo que es una de mis grandes características.

¿Qué proyecto tiene por hacer?

Quisiera aprender otro idioma. Ya hablo francés, inglés, portugués. Me gustaría aprender italiano o estudiar historia del arte. Eso: me gustaría estudiar.

¿Una frase que defina su modo de ver el mundo?

Disfrutar todo, porque todo pasa por alguna razón. Y lo mejor es lo que pasa. Las cosas malas, que uno cree que son malas, pasan porque uno tiene que aprender. Hay que disfrutarse el proceso de cada paso que uno da.

¿Qué es el bienestar para usted?

Envejecer con salud. Bienestar es vivir bien, tranquila, en paz, con salud. Es poder hacer todo lo que uno quiere sin ningún tipo de limitaciones. Si quiero escalar una montaña, bienestar es poder hacerlo. Si quiero viajar con mis hijos, caminar seis horas al día, bienestar es poderlo hacer sin problemas.

¿Cómo le gusta que la vean?

Que cuando la gente piense en Patricia López no piense en escándalos ni en cosas malas, o que hizo cosas que no eran debidas. Lo que haga hoy quisiera que mis nietos lo vean y piensen “qué chévere mi abuela”, y no que digan “qué vergüenza, mi abuela metida en este escándalo”. Sino que siempre he sido una persona consecuente de lo que he querido ser.