Cuando hay niños en la familia debemos estar siempre muy atentos a evitar accidentes caseros. Uno de los más frecuentes son las intoxicaciones. ¿Qué debemos hacer para prevenirlas? ¿Y qué hacer cuando ocurren?
as intoxicaciones en los niños menores de seis años, generalmente, son causadas porque ingieren una sustancia tóxica, medicamentos, jarabes o píldoras para adultos. También cuando accidentalmente se dosifica mal algún medicamento del niño o porque entra en contacto con sustancias químicas sobre la piel.
¿Cuáles son los productos que deben mantenerse lejos de los niños?
• Medicamentos, tanto los recetados a los adultos como los que debe tomar el niño.
• Líquidos empleados para el aseo: blanqueador, jabones líquidos, limpiavidrios…
• Productos provenientes de hidrocarburos: thinner, gasolina, petróleo, aceites, lubricantes, productos para el motor del carro.
• Productos de belleza: esmalte, removedor, acetona.
• Insecticidas.
Humberto Rivera, coordinador de urgencias de la Clínica Pediátrica Colsanitas, afirma que el principal motivo de consulta por urgencias relacionado con intoxicaciones es la ingesta de blanqueador: “este tipo de desinfectante, que contiene baja concentración de hipoclorito de sodio (6,25%), no resulta tan irritativo y produce menos efectos adversos que otros productos. Sin embargo, los bebés y los niños no deben por ningún motivo ingerirlos”, afirma el especialista.
¿Cómo prevenir una intoxicación en casa?
• Todos los productos químicos mencionados anteriormente deben guardarse en lugares de la casa a los que los niños no puedan acceder: estanterías altas, cajones con llave o cuartos cerrados.
• No almacenar estos productos en frascos de alimento, por ejemplo botellas de agua o tarros de leche, porque pueden ser confundidos por el niño y por usted mismo.
• Muchas veces, a pesar de las precauciones, se producen los accidentes, entonces es importante conocer la cantidad de producto que hay en los frascos para poder estimar la cantidad ingerida por el niño.
• Apenas los niños empiezan a caminar y a explorar toda la casa con libertad (este momento varía en cada bebé), es necesario hablarles con claridad sobre lo que no pueden tocar, abrir o llevar a la boca. Aunque no hablen, ya entienden muchos de los conceptos que necesitamos explicarles.
¿Cuáles son los signos de alerta de una posible intoxicación?
Lo principal es mantener la calma y actuar rápido. Si los padres encuentran al niño con el recipiente de algún tóxico, o medicamente, abierto o vacío deben estar alerta a los siguientes signos:
• Quemaduras de labio y boca
• Olor en la boca o babeo inusual
• Manchas en la ropa
• Náuseas y vómito
• Dolor abdominal
• Dificultad para respirar
• Cambios súbitos de comportamiento como somnolencia, irritabilidad o ansiedad
• Convulsiones o inconciencia
La mayoría de los niños que ingieren un tóxico no corren peligro, especialmente si reciben un tratamiento inmediato con los especialistas.
¿Qué hacer en caso de un accidente en casa?
• No induzca el vómito, por ningún motivo. Este es el mayor error que cometen los padres. Si la sustancia ingerida es muy ácida o muy alcalina, el vómito puede causar mayor irritación o daño en el tracto gastrointestinal: esófago, estómago, etc.
• No ofrezca alimentos o líquidos al niño porque esto podría inducir más vómito y mayor irritación.
• Siempre mantenga la calma y evite seguir los consejos de personas que no sean pediatras, médicos o personal de salud con experiencia en el tema. No aplique nada en la piel de los niños si no se lo ha recetado un especialista.
• Si la intoxicación se ha producido por algún producto sólido, incite al niño a escupirlo. Si está al alcance de sus dedos trate de retirarlo, pero solo si puede ver el objeto o producto en la boca del niño. No realice barridos con el dedo sin observación directa, porque puede impactar un cuerpo extraño en la vía aérea o inducir al vómito, que está contraindicado.
• Acuda inmediatamente al servicio de urgencias y lleve el recipiente del producto que causó la intoxicación.
• No piense que porque el niño consumió una cantidad leve del producto entonces no es peligroso o no va a causar ninguna lesión. Igualmente debe llevarlo a urgencias.
Las intoxicaciones con cualquiera de estos productos pueden causar en los niños quemaduras de la mucosa gastrointestinal, perforaciones del tracto gastrointestinal, reacciones inflamatorias del pulmón, bronco-aspiración y alteraciones sistémicas por absorción de la sustancia, que pueden llegar a comprometer la vida del niño. Por eso es necesario mantener estos productos alejados de los menores, y si ocurre algún accidente es preciso acudir inmediatamente al servicio de urgencias más cercano.
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