Una especialista resuelve algunas dudas sobre el uso adecuado del termómetro, un elemento básico en cualquier botiquín.
El termómetro es un instrumento que sirve para medir la temperatura. En la actualidad es clave para medir la temperatura corporal y detectar síntomas como la fiebre. Sin embargo, es importante hacer algunas aclaraciones sobre el uso correcto de esta herramienta, que puede ser peligrosa en caso de romperse accidentalmente. Para eso, hablamos con la doctora Natalia Restrepo, neonatóloga y pediatra adscrita a Colsanitas.
¿Cuál es la diferencia entre los termómetros convencionales y los digitales?
El termómetro tradicional funciona por la dilatación de metales y alcoholes expuestos al calor, es decir que, al tener contacto con un objeto o persona que emite calor, el elemento se dilata y refleja su temperatura. Los registros de los termómetros dependen de las escalas de temperatura, que pueden ser: Celsius o grado centígrado (°C), Fahrenheit (°F) y Kelvin (°K).
Por otro lado, los termómetros digitales no utilizan mercurio y pueden mostrar la temperatura a través de circuitos eléctricos. Según la doctora Restrepo, ambos dispositivos son confiables para leer la temperatura corporal en niños y adultos, pero el termómetro convencional representa riesgos ambientales, por lo que ha entrado en desuso.
El dato
La Resolución 0159 de 2015 busca eliminar el uso de termómetros con mercurio para sustituirlos por alternativas más seguras.
¿En qué parte del cuerpo es mejor tomar la temperatura?
El mejor lugar para tomar la temperatura corporal es la axila por condiciones de higiene. En otros puntos como el ano o la boca puede haber contaminación de los fluidos que se encuentran allí.
Además, se puede tomar en el oído con un termómetro digital que utilice escáner infrarrojo para medir la temperatura dentro del canal auditivo. Sin embargo, la cera del oído, el tamaño, o la forma curva del canal auditivo pueden interferir en la precisión de la lectura de temperatura.
¿Dónde deben guardarse?
Se recomienda que el lugar de almacenamiento de cualquier termómetro sea fresco, lejos de temperaturas extremas. Asimismo, los termómetros de mercurio deben guardarse fuera del alcance de los niños porque podrían romperse y provocar una intoxicación por mercurio.
¿Cuáles son los mejores termómetros?
Los termómetros más seguros y efectivos son los digitales.
¿Cada cuánto se debe cambiar un termómetro?
La vida útil de un termómetro de mercurio es de aproximadamente 200 horas de uso antes del desgaste y posible calentamiento por los cambios de temperatura. El termómetro digital funciona en óptimas condiciones dependiendo del tiempo que le dure la pila. Se recomienda cambiarla una vez al año.
¿Qué debe hacer si se rompe un termómetro de mercurio?
La exposición al mercurio, sea en grandes o pequeñas cantidades, puede generar graves problemas de salud. Este elemento puede ser tóxico para los riñones, pulmones, ojos, sistemas nervioso e inmunitario, el aparato digestivo y la piel.
El mercurio es uno de los diez productos químicos que generan problemas de salud pública, según la Organización Mundial de la Salud (OMS). De acuerdo con la doctora Restrepo, estos son los pasos que debe seguir en caso de que se le rompa un termómetro de mercurio:
1. Póngase guantes o use una bolsa para recoger cuidadosamente el vidrio roto, envuélvalo en cinta y póngalo en una bolsa de plástico, sin que el elemento tenga contacto con los dedos.
2. Ubique las gotas más grandes, recójalas utilizando un papel duro y póngalas en una bolsa de plástico.
3. Para recoger las gotas de mercurio más pequeñas use cinta adhesiva, un gotero o jeringa.
4. Ilumine con una linterna alrededor del área y a ras del suelo para buscar cualquier gota que no haya recogido. Tenga en cuenta que las gotas pueden desplazarse rápidamente, si el suelo es liso, busque por toda la habitación y debajo de los muebles.
5. Cuando haya retirado todas las gotas visibles, limpie el área del derrame con toallas de papel mojadas con agua.
6. Coloque las gotas de mercurio en una bolsa de plástico junto al material que utilizó para limpiar el derrame.
7. Selle la bolsa con todos los desechos y póngala dentro de otra bolsa.
8. Lávese las manos con agua y jabón.
9. Ventile la habitación por al menos 24 horas y evite que el espacio sea ocupado durante ese tiempo.
10. Lleve la bolsa que contiene el derrame de mercurio al punto de recolección más cercano.
11. Procure utilizar termómetros sin mercurio.
Tenga en cuenta:
-No utilice una aspiradora para limpiar el mercurio porque esto provoca que el metal se quede en el aire y aumentará la exposición.
-No use una escoba para limpiar el mercurio, lo dividirá en gotas más pequeñas y las expandirá.
-No vierta el mercurio en un desagüe. Puede atascarse en las tuberías y causar contaminación en la fosa séptica o en las plantas de tratamiento de aguas residuales.
-Evite usar la lavadora para limpiar ropa u otros artículos que estuvieron en contacto con el mercurio porque se pueden contaminar las aguas residuales y la lavadora. Tire a la basura la ropa contaminada y llévela al punto de recolección más cercano.
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