Con un poco de dedicación y creatividad podemos darle nueva vida al hogar. Aquí les contamos cómo hacerlo sin gastar una fortuna.
l primer paso para cambiar la apariencia de un lugar de la casa es ordenarla. Al hacer un inventario de los objetos sabemos si siguen siendo funcionales, si podemos darles una nueva imagen o si definitivamente tenemos que sacarlos de la casa o regalarlos a alguien que lo necesite.
Para Liliana Ramírez creadora de Get Simple, organizadora profesional de espacios, mantener una casa ordenada genera grandes beneficios para la salud: “Si tenemos muchas cosas, seguro habrá objetos que nos molestan o no nos sirven y por eso estorban y generan ruido visual. Estos elementos cortan la armonía y la funcionalidad de la casa. Si organizamos o remodelamos, eliminamos la saturación visual y esto va a mejorar nuestro estado de ánimo. Va a fluir la armonía, la creatividad, vamos a poder enfocarnos mejor en las tareas, nos vamos a sentir más tranquilos. Además, ahorraremos dinero porque no vamos a comprar cosas repetidas o, mejor aún, vamos a encontrar objetos que creíamos perdidos”.
Aunque ya no hay cuarentena obligatoria, quedarse en casa sigue siendo la mejor opción de autocuidado. Y es por eso que renovar los espacios, cambiar de sitio los muebles, una planta o un cuadro, despejar zonas de la casa para que los niños puedan jugar, puede ser una opción fácil para darle un toque diferente al hogar.
También se pueden hacer cambios más radicales, que requieren una inversión. Valeria Montejo, arquitecta con énfasis en diseño interior, nos comparte algunas recomendaciones para remodelar sin invertir mucho dinero, haciendo uso, principalmente, de la creatividad.
1. Si usted no tiene mucho talento o inspiración para repensar un espacio, entonces lo ideal es buscar un diseñador de interiores. Hay que cotizar un servicio que se ajuste a su presupuesto.
2. Si se siente animado a empezar por su cuenta, lo ideal es buscar referencias de lo que le gusta. La aplicación Pinterest es útil para encontrar de todo y más. Reúna fotos de muebles u objetos que ha visto en la sala de un amigo o en cualquier otro lugar. Haga una carpeta con todo lo que lo inspira.
3. Una vez tenga todo el archivo de referencias revise cada imagen e identifique qué fue lo que más le interesó de ese espacio.
4. Escoja los detalles específicos que quiere en el lugar a transformar.
5. Una buena idea es empezar la transformación pintando los espacios, porque el color ayudará a determinar la decoración. Es clave no repetir colores en diferentes sitios de la casa, cada uno debe tener su propia identidad, y no excederse con la pintura de colores. Debe haber zonas de descanso visual.
6. Retapizar una poltrona o un mueble; pintar de un color llamativo una mesa de noche anticuada; cambiar las manijas de una estantería, son algunas de las opciones económicas que le darán una nueva vida a los objetos que ya tenía.
7. Si definitivamente quiere comprar objetos nuevos piense primero en artesanías colombianas. Si ya tiene el ojo afinado con lo que realmente quiere, encontrar esos objetos será fácil.
Tendencias decorativas vigentes
1. Grandmillenial: en este estilo predominan los objetos antiguos o vintage pero con toques contemporáneos. Resaltan las telas con patrones, los papeles de colgadura, los objetos dorados, entre otros.
2. Bohemio: inspirado en en el movimiento hippie de los años 60 del siglo pasado. Combina muchas texturas, tejidos y patrones. Predominan los colores tierra y los pasteles.
3. Victoriano: Combina colores como vino, ámbar, pino, dorado y mostaza. Predominan los objetos en madera oscura, el terciopelo, las alfombras persas, las lámparas con muchos cristales y detalles.
4. Industrial: toma de referencia las fábricas antiguas, los objetos con óxido, los materiales crudos o rústicos y el cuero.
5. Escandinavo o nórdico: es un estilo minimalista, que pone su acento en la funcionalidad y la simplicidad de los objetos. Utiliza elementos como la cabuya, el rattan, el mimbre y le da especial protagonismo a las plantas. Es un estilo que exalta lo natural.
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