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Bienestar Colsanitas

Guía para conocer y cuidar los senos

Para detectar alguna anomalía en los senos es necesario conocerlos y saber cuáles son las señales de alarma. Aquí encontrará una completa guía.

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os ha pasado a muchas. Sentimos un dolor o una molestia en el seno y recurrimos a internet para buscar respuesta. O escribimos en el chat de las amigas para preguntar si otras han sentido algo parecido. Y así vamos escalando hasta llegar, finalmente, a donde deberíamos haber llegado primero: al especialista (ginecólogo o mastólogo).

Para resolver las dudas más comunes que tenemos sobre los senos recurrimos a dos expertos: Johana Ibarra, cirujana de mama y tumores de tejidos blandos y Sebastián Quintero, cirujano oncólogo mastólogo, ambos adscritos a Colsanitas.

¿Cuál es el primer paso para descubrir alguna anomalía en el seno?

Estar siempre atentas a cualquier cambio en el aspecto. Así como identificamos un nuevo lunar, mancha o grano en la cara, así deberíamos conocer las características de nuestros senos. El tacto que debemos hacernos cada mes sirve para identificar masas o bultos, y también para sentir si hay algún dolor o molestia o cualquier otra anormalidad.

¿Desde qué edad se debe acudir a un especialista para examinar los senos?

Después de los 30 años se debe hacer valoración clínica anual con un especialista y en algunos casos se recomienda la ecografía. La mamografía debe hacerse después de los 40. Tenga en cuenta que el 32 % de los casos de cáncer de mama se diagnostican antes de los 50 años.

¿Cuáles son los exámenes clínicos más comunes para diagnosticar cáncer de seno y en qué momento se hacen?

- El principal es la mamografía. Se recomienda hacer anualmente a partir de los 40 años. Al lograr identificar las lesiones de manera temprana este examen ha logrado disminuir la mortalidad de las pacientes de cáncer de seno en un 25 %.

- La ecografía se realiza en pacientes menores de 40 años. Si se combinan mamografía, ecografía y examen clínico esto nos puede dar un 98 % de seguridad en un diagnóstico de cáncer de seno.

- La resonancia magnética se usa en pacientes de alto riesgo o con mamas muy densas.

Cuidadp de los senos

¿Cómo se hace un buen autoexamen?

- Debe hacerse ocho o diez días después del período.

- Este es un autoexamen comparativo, es decir, lo que siente en un seno debe sentirlo en el otro. Este es un buen consejo para saber si algunas fibras o formas que se sienten en la mama son normales (si se presentan en ambas) o si solo están en un seno (lo que sería un signo de alerta).

- Debe revisarse frente a un espejo y verificar si los dos senos están iguales. Tenga en cuenta que es normal que un seno sea ligeramente más grande que el otro. Observe sus senos con las manos en la cintura y después lleve las manos detrás de la nuca.

- Lleve una mano a la nuca y con la otra palpe todo el seno desde la parte más cercana a la axila hacia abajo, en movimientos circulares. Si lo prefiere, puede hacerlo en la ducha pues el jabón ayuda a deslizar los dedos.

- Realice una ligera pero firme presión sobre el pezón para identificar si sale alguna secreción.

- Repita el examen acostada boca arriba.

- Es aconsejable enseñarles a las adolescentes a hacerse el autoexamen, pues los hábitos se adquieren mejor en la juventud. De esta forma el autoexamen pasa a ser parte de una rutina.

¿Cuáles son los signos de alarma y cuándo se debe consultar a un especialista?

Lo ideal es ir con el especialista apenas notemos alguna anormalidad a la vista o al tacto. Además hay otros indicadores relevantes:

- Bulto o engrosamiento de la piel. Hundimientos en algunas zonas que se perciben solo en un seno.

- Cambio en el tamaño o la forma.

- Enrojecimiento.

- Inversión del pezón.

- Secreción espontánea de líquido con sangre o transparente, sobre todo en la noche.

¿Cuáles son los signos de alarma específicamente en el pezón?

Pezón invertido (es decir con la punta hacia adentro), engrosamiento de la areola, cambios en el color o la textura.

¿Es normal que duelan los senos?

Sí. El síndrome premenstrual puede ocasionar dolor. Debido a los cambios hormonales que se presentan días previos a la menstruación, la mama puede retener líquidos y esto hace que aumente la sensibilidad y se produzca el dolor. En algunos casos estos cambios suceden entre los ocho y los quince días antes del período. Generalmente cuando llega el período se va el dolor.

Sin embargo, hay dolores que se pueden generar por golpes en la mama y otros que se producen en estructuras cercanas al seno pero no directamente ahí (en el músculo o en las costillas) y esto lleva a pensar que es un dolor de seno. La gran mayoría de los tipos de cáncer no son dolorosos, aunque cualquier dolor o síntoma requiere de la valoración de un especialista.

Hay otros dolores en puntos específicos del seno, como las zonas laterales o la parte que está más cerca a la axila. Es allí donde se ubica 80 % del tejido mamario, por eso en esta zona se pueden sentir más molestias en diferentes épocas del mes. Todos los cuerpos son distintos y reaccionan diferente ante los cambios hormonales.

¿Cómo se siente un tumor?

Hay unos muy bien definidos y otros que incluso a los especialistas les cuesta identificar. Lo más importante para reconocer si se trata de un tumor o un quiste es que la mujer sepa cómo se siente su seno. El doctor Quintero usa la siguiente comparación: “Todos los senos tienen estructuras diferentes, hay unos que pueden sentirse como bolsas de arroz, otros como bolsas de lentejas, de garbanzos, todo depende de las estructuras que tenga. La alarma debe prenderse cuando en mi seno, que se parece a una bolsa de frijoles, siento una aceituna. Por eso es tan importante conocer cómo se siente el interior de los senos”.

¿Cuál es la diferencia entre un tumor y un quiste?

Desafortunadamente se ha empezado a denominar coloquialmente quiste a cualquier masa del seno, y es incorrecto. En el lenguaje médico un quiste es una masa, nódulo o tumor cuyo contenido es líquido y eso lo diferencia de los tumores sólidos o compactos. La gran mayoría de los tumores cancerígenos son sólidos.

El 40 % de las mujeres tienen quistes en la mama, pero los quistes por sí solos no aumentan la posibilidad de tener cáncer de seno y normalmente se dejan quietos, solo se tratan cuando son sintomáticos o demasiado grandes, según la indicación del radiólogo.

¿Hay alimentos que producen quistes o que son nocivos para los senos?

No específicamente pero si se recomienda tener siempre una dieta sana, balanceada, con muchas verduras, frutas, frutos secos, proteínas magras y más presencia de carnes blancas que rojas.

¿Las mujeres con ovarios poliquísticos son más propensas a padecer cáncer de seno?

No. Tienen el mismo riesgo de la población general, recomendamos que tengan el control anual como todas las mujeres.

¿El tamaño de los senos afecta la aparición de quistes o tumores?

No existe ninguna relación entre el cáncer de seno y el tamaño de estos.

¿La cirugía de reducción de senos puede prevenir la aparición de quistes o tumores?

La mamoplastia de reducción, es decir la cirugía que se hace por indicación quirúrgica cuando los senos son muy grandes y generan dolor de espalda o de columna, no previene ni reduce la aparición de quistes o tumores. El tejido mamario sigue presente y por tanto propenso a tener quistes. Diferente a la mastectomía profiláctica, que es la que se realiza quitando toda la glándula mamaria en pacientes de muy alto riesgo de padecer este tipo de cáncer.

¿A las mujeres con prótesis se les dificulta hacerse el autoexamen?

Puede cambiar la sensación al tacto pero nada más. elobjetivo del autoexamen no es solo identificar agentes extraños sino conocer el seno, saber cómo se siente el seno de cada mujer. Si una mujer lleva prótesis, debe saber cómo se siente dentro del seno. La técnica no cambia pero, claramente, cambia lo que siente.

¿Cómo se transforman los senos después de la lactancia?

Después de que una mujer ha lactado se completa el desarrollo de un seno. La lactancia completa las funciones de la mama. Luego de que la mujer lacta se vive un proceso involutivo para que el seno vuelva a su estado normal. Es normal que después de este proceso el seno presente modificaciones de tamaño o apariencia, pues algunas mujeres pierden grasa y tejido glandular (lo que hace lucir los senos más pequeños) y en otras aumenta, por eso los pueden sentir más duros o fibrosos. La lactancia materna por encima de un año puede otorgar un beneficio a la hora de proteger la mama en el futuro.

¿Es malo usar brasier todo el día, incluso para dormir?

Muchas mujeres padecen dolores en la zona por culpa de brasieres muy ajustados o con varillas que pueden lastimar los nervios que le dan sensibilidad al seno. Si el brasier es adecuado a la dimensión del busto y cómodo no debería haber problema en usarlo todo el tiempo. Tenga en cuenta que la talla del brasier va cambiando con los años.

¿Hay telas de brasier no recomendadas para la piel de los senos?

Sí. La tela que se recomienda para los brasieres es algodón, pues las sintéticas pueden causar piquiña, dermatitis de contacto entre otras alteraciones.

¿Dormir boca abajo puede ser  dañino para los senos?

No, pero en algunas mujeres puede causar dolor, sin embargo no genera ni tumores ni quistes.

¿Cómo proteger los senos durante los ejercicios de alto impacto?

Hay que usar indumentaria deportiva cómoda, que no apriete mucho los senos pero que permita ejercer su labor de sostén.

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