El aislamiento preventivo y el toque de queda para los mayores de 70 años son medidas importantes en términos de salud pública. Aquí recogemos algunas recomendaciones para el cuidado de la salud física y mental de los adultos mayores en casa.
l aislamiento ha demostrado ser una estrategia útil para frenar el contagio del coronavirus o COVID-19. Aunque parezca drástica o exagerada, es lo más efectivo que se puede hacer para frenar la expansión del virus y mitigar un poco las consecuencias para el sistema de salud.
Según Daniel Ossa Pérez, director del Programa del Adulto Mayor de Keralty, el confinamiento es un reto para la salud mental de la población, principalmente en adultos mayores y sus cuidadores. Durante el aislamiento se pueden ver afectados el bienestar y la calidad de vida, porque se hace más difícil suplir necesidades básicas como la alimentación y el disfrute de la familia, y todo esto tiene una serie de impactos en la salud mental y estabilidad emocional de los viejos.
El geriatra Robinson Cuadros propone mirar la directriz de confinamiento obligatorio como una medida transitoria, que nos debe unir y nos invita a ser creativos. “Estar en casa no es ni triste ni aburrido. Tenemos que recalcar que es una pausa, un silencio provechoso para la salud mental, para el reencuentro espiritual”.
Haga pausas activas
Esta estrategia se implementa con frecuencia en algunas empresas, pero en casa puede ser ideal para evitar la quietud y las dolencias provocadas por el sedentarismo. Mover las manos, las muñecas y los dedos; estirar brazos y piernas; mover cabeza y cuello a ambos lados son ejercicios sencillos pero eficientes. YouTube ofrece infinidad de videos para hacer yoga, taichi, gimnasia, estiramientos o cualquier otra actividad física dentro de la casa.
Compre a través del teléfono o en internet
Cuando el cuidador sale a la calle para comprar alimentos o medicamentos para la persona mayor se expone al contagio y expone a las personas de su entorno. Por eso, en la medida de lo posible, use el servicio a domicilio de los supermercados, droguerías y hasta plazas de mercado que, como la de Paloquemao, ofrecen esta facilidad. Hoy todos conocemos innumerables aplicaciones que ofrecen el servicio de entrega a domicilio de alimentos, medicamentos o cualquier otro producto, para que la persona mayor o su cuidador no tengan que salir de casa.
No consuma información en exceso
Nunca antes habíamos vivido una situación como la actual en un mundo tan conectado. Esto nos ha permitido conocer el origen del virus, sus características y su comportamiento en tiempo real. Pero también es importante definir un límite para consumir esta información, que puede generar estrés y desequilibrio emocional. Los especialistas comparten algunas recomendaciones al respecto:
· No revise las redes sociales a primera hora de la mañana.
· Procure comer sin la televisión al frente o el celular al lado.
· Evite leer y difundir información que no provenga de fuentes confiables como el Ministerio de Salud y Protección Social y la Organización Mundial de la Salud.
· Utilice aplicaciones que le ayuden a regular el uso de las redes sociales y del propio aparato.
Busque actividades alternas
Muchas actividades familiares han dejado de realizarse de manera compartida por el afán del trabajo o la rutina.
· Cocinar en familia. Una de las mayores recomendaciones en este y cualquier momento es mantener una buena alimentación, por eso cocinar puede ser una actividad para compartir tareas y apoyarse en el cuidado. Alguno puede encargarse de proponer la receta, otro de lavar las frutas, otro de picar los vegetales… las personas responsables del cuidado deben administrar las responsabilidades de cada persona de acuerdo a su edad y capacidades.
· Volver a los juegos de mesa. Además de ser una actividad ideal para compartir y despejar la mente, los juegos de mesa invitan a los adultos mayores a ejercitar la memoria, la concentración y la motricidad.
· Desempolvar los álbumes de fotos familiares. Este recurso puede ayudar a despertar emociones positivas, ejercitar la memoria y propiciar el intercambio de historias y conversaciones lejanas a la situación actual.
· Escuchar música. Esta es una oportunidad para soltar los audífonos y conocer los gustos musicales de quienes comparten la casa. Además, para los adultos mayores este puede ser un estímulo ideal para recordar y conversar.
· Cuidar las plantas. La jardinería está de moda, y a los adultos en general les gusta mucho.
· Escribir cartas, escribir su autobiografía, para que se sigan sintiendo productivos en esta etapa.
· Retomar algún instrumento que dejaron guardado.
· Pintar, redescubrir los talentos artesanales y artísticos.
· Hacer arreglos en la casa.
· Contactar amigos y familiares con quienes se tiene tiempo sin hablar.
· Leer los libros pendientes, estudiar algo nuevo.
Aproveche la tecnología
Esta es una oportunidad para derribar el prejuicio de que los adultos mayores no pueden hacer uso de la tecnología para el entretenimiento. Si no sabe, enséñele a manejar el celular, la tableta o el computador; esta puede ser una actividad que, con paciencia, les permita compartir conocimiento y divertirse. A través de la tableta, el celular o el computador familiar el adulto mayor puede:
· Hacer visitas virtuales guiadas a museos de distintas partes del mundo.
· Asistir a conciertos virtuales de orquestas filarmónicas que están ofreciendo actividades gratuitas por diferentes plataformas como YouTube, Facebook Live e Instagram Live.
· Ver películas que tengan un mensaje enfocado en el sentido de la vida y la esperanza.
· Hacer videollamadas a familiares y amigos.
Recomendación
Muchos adultos mayores viven solos. Si conoce algunos en su edificio, conjunto residencial o vivienda cercana, ofrézcale comprar sus medicamentos o alimentos. Conversar por algunos minutos al día es de gran ayuda. La solidaridad puede ser crucial para evitar el deterioro de la salud mental y física de muchas personas.
Conozca las líneas de atención de su ciudad y utilícelas en caso de síntomas como dificultad para respirar y fiebre o cuando sienta que pierde el control de sus pensamientos. Evite asistir a urgencias y posponga las citas médicas que pueda.
Continuar con las medidas
Si se convive con adultos mayores, hay que ser estrictos en el cumplimiento de las normas de higiene. No dar la mano ni saludarlos de beso o abrazo, y evitar el acercamiento físico si hemos estado en la calle y en contacto con otras personas. “Se puede compartir con ellos normalmente, pero siempre ser muy exhaustivos con las medidas. Y que no estén cerca de personas con síntomas de gripe. Es una invitación a dejar en cuarentena estas expresiones de afecto porque entre más nos protejamos, podremos salvar a más gente del contagio”, concluye Robinson Cuadros.
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