No sigue dietas por moda y prefiere investigar antes de seguir un modelo de alimentación. Practica el ayuno intermitente y goza de sus beneficios físicos y mentales.Su cuerpo perfecto es prueba de ello.
ita Bendeck siempre ha sido hermosa. Empezó en el modelaje cuando era niña. “Fui una modelo gordita, que llamaba mucho la atención”, asegura. A los 16 años viajó a Estados Unidos y
aterrizó en pleno furor de la onda fitness que se vivía durante los años ochenta. Fue entonces, mientras estudiaba Filosofía y Psicología, que moldeó el cuerpo perfecto con el que la hemos visto interpretar docenas de personajes de televisión, durante los últimos 25 años.
Hace un tiempo empezó a subir de peso. “Estaba aburrida porque ganaba grasa en el abdomen y en las caderas y no me sentía cómoda. “¡Ese nunca había sido mi cuerpo!”, comenta. Fue cuando decidió leer sobre el fasting (ayuno intermitente) y no solo perdió varios kilos y centímetros, sino que descubrió que se siente mucho más ligera, concentrada y feliz.
“La cultura norteamericana nos ha vendido muchos mitos: que debemos comer cinco y seis veces al día, que la leche es mala, que el desayuno es la comida más importante. Pero nada de eso es cierto, el hombre primitivo comía cada vez que había comida y, si uno estudia la filosofía yogui, descubre que el cuerpo funciona mejor con menos alimento”, continúa.
Sin embargo, Rita está lejos de ser una mujer de prohibiciones: “Me fascina comer y odio restringirme. Voy a restaurantes, soy de tomar vino, cocinar con mantequilla, comer de vez en cuando un postre o una pasta. Todo esto lo puedo combinar con el ayuno, en el que dejo una ventana de 16 a 20 horas sin ingerir alimento. En serio, es una maravilla, he vuelto a usar ropa que tenía guardada desde hace 30 años y, contrario a loque se cree, he ganado masa muscular”.
A esta forma de alimentarse le suma entrenamiento en el gimnasio (mejor si lo hace en ayunas) tres o cuatro días a la semana, una sesión de yoga todos los sábados y mucha meditación. También asiste sagradamente al spa, para sesiones de masaje, sauna y turco, que la ayudan a mantenerse libre de toxinas.
Cinco reglas para vivir bien:
1. Mantener un equilibrio mental y jamás elegir opciones radicales. Nada en exceso es bueno: ni la comida, ni la dietas, ni la filosofía ni nada".
2.Tomar una copa de vino de vez en cuando. Tiene antioxidantes y alegra el día.
3. Se debe comer bien, más proteínas y vegetales, pero olvidarse de las prohibiciones. El día que se quiere comer dulce, se come. Hay demasiadas tristezas en la vida para sumarle una más.
4. La buena comida es para ser disfrutada. Si es con amigos, mucho mejor.
5. Reír. Sin la risa nada tiene sentido.
Su piel la cuida con tratamientos de radiofrecuencia e hidrataciones con aceite de coco. Durante los días de confinamiento descubrió los beneficios de los ejercicios faciales y ahora hacen parte de su rutina diaria. Durante este tiempo también ha aprovechado para desintoxicar la piel del maquillaje y ha probado recetas de belleza caseras, como el blanqueamiento dental con cúrcuma. Para el cuidado de su pelo inició un proceso muy orgánico: lo lava cada tres o cuatro días y no aplica en lo posible ningún producto químico. Prefiere los aceites naturales y las ampolletas de semillas de lino.
Rita es alegre y fiestera, pero muy disciplinada. Le gusta leer y disfruta los amaneceres desde la hamaca en su apartamento de Barranquilla. Pero, para ser honestos, lo que mantiene a Rita radiante es la música, el baile y la cocina. Le gusta inventar recetas con mezclas exóticas, como especias y nueces; armar fiestas imparables y pinchar discos. Y no se imagina la vida sin salir a la calle para festejar sin límite durante los carnavales en su ciudad
Dejar un comentario