Consultamos a dos expertas para esclarecer las dudas más frecuentes sobre la alimentación de los pacientes en proceso de recuperación del nuevo coronavirus.
a estrecha relación que existe entre la nutrición y la inmunidad está más que comprobada, motivo por el cual es importante que todas las personas presten especial atención a llevar una dieta suficiente, variada y balanceada en tiempos de pandemia.
El Comité Internacional para la Elaboración de Consensos y Estandarización en Nutriología (Cienut) describe claramente esta premisa en un documento que reúne información para el manejo nutricional del coronavirus, explica Luisa Fernanda Becerra, nutricionista-dietista adscrita a Colsanitas. “Las personas que lleven una dieta balanceada, con un aporte suficiente de macro y micronutrientes tienen menos probabilidades de contraer enfermedades asociadas con cualquier proceso inflamatorio”. En el caso de la covid-19, el estado nutricional podría ser esencial para que se reduzca el riesgo de desarrollar cuadros graves de la enfermedad.
¿Qué debe tener en cuenta una persona que ya tiene el virus, en términos de la dieta?
Hay varios factores a considerar. “En general las personas con covid-19 tienen un compromiso inflamatorio importante”, explica la doctora Ángela Navas, médico especialista del Grupo de Soporte Nutricional de la Clínica Reina Sofía. “Pierden el gusto y el olfato y, además, presentan hiporexia, es decir, falta de apetito. Si sumamos la baja ingesta de alimentos con el aumento de gasto calórico provocado por la enfermedad con la fiebre, la dificultad para respirar y la inflamación, muchos pacientes pierden peso. A mayor severidad de la enfermedad, mayor será la pérdida de peso”, puntualiza.
Lo anterior es preocupante, ya que la mayor parte de esa pérdida corresponde a la masa muscular. “Por esto, en el momento de la recuperación se busca ganar nuevamente la funcionalidad. Esto se logra con una alimentación suficiente y balanceada, así como haciendo ejercicio guiado por un profesional en terapia física y respiratoria. Hay que comer muy bien, con buenas porciones y, especialmente, sin descuidar el aporte de proteína”, concluye.
Entonces, ¿qué comer y qué no?
Esta es la pregunta del millón. Antes que nada, explica Luisa Fernanda Becerra, “Se debe preferir una alimentación natural que incluya alimentos frescos; variedad de frutas y verduras, carnes y aves magras, pescados ricos en omega 3 como salmón y atún, cereales integrales y grasas saludables. Así mismo, se aconseja evitar el consumo de comidas rápidas, productos congelados, bebidas azucaradas y alimentos procesados”.
Ahora bien, las dos profesionales consultadas coinciden en que hay algunas consideraciones más concretas que dependen de qué tan grave haya sido la enfermedad. “Hay personas que no tuvieron una repercusión sistémica importante y permanecieron en casa, mientras que otros tuvieron que ser hospitalizados”, dice la doctora Navas. En este punto, Becerra enfatiza en las siguientes recomendaciones nutricionales:
En pacientes contagiados y no hospitalizados, es recomendable:
-Tomar abundantes líquidos, preferiblemente agua, al menos 1,8 litros al día.
-Comer diariamente cinco porciones de frutas y de verduras frescas y variadas, para optimizar el aporte de vitaminas y minerales que son esenciales en la respuesta inmune del organismo.
-Optar por cereales integrales ricos en fibra como arroz integral, avena en hojuelas, pasta integral, acompañados de leguminosas como frijol, lenteja, garbanzo y soya.
-Incluir lácteos fermentados bajos en grasa como yogur, kumis y kéfir.
-Consumir carnes rojas una vez a la semana; pescados y aves como pollo o pavo entre tres y cuatro veces a la semana, y huevos de tres a cuatro veces a la semana.
-Preferir grasas saludables, las cuales se encuentran en frutos secos como pistachos, almendras y marañones, aceite de oliva y semillas de calabaza, entre otros.
"Hay una estrecha relación entre la nutrición y la inmunidad, por lo cual es importante llevar una dieta suficiente, variada y balanceada".
En pacientes hospitalizados con impacto moderado:
-Se debe mantener la alimentación por vía oral, monitoreando de manera estricta la tolerancia a los alimentos y la ingesta calórica del paciente.
-Se recomienda usar complementos y fórmulas nutricionales en personas en las que no se logra una buena tolerancia a la comida y, por ende, enpacientes en los que no se pueda cubrir el requerimiento calórico con alimentación por vía oral.
En pacientes hospitalizados críticos:
Se recomienda el uso de soporte nutricional enteral —administración de nutrientes directamente en el tracto gastrointestinal mediante sonda— cuando la alimentación por vía oral sea inviable por más de tres días o cuando por medio de las comidas en combinación con las fórmulas nutricionales no se logra cubrir los requerimientos por más de una semana.
"El manejo nutricional del paciente crítico debe ser dirigido y monitoreado por un especialista en nutrición".
¿Los pacientes covid-19 deben comer más?
Antes que nada, no sobra decir que el manejo nutricional del paciente crítico positivo para covid-19 debe ser dirigido y monitoreado por un especialista en nutrición, quien determinará el requerimiento calórico del paciente de acuerdo con su grado de afectación. La doctora Ángela Navas explica que en términos generales “sí es importante consumir más calorías que las habituales porque hay que recuperar el peso, especialmente el músculo perdido. Este incremento debe incluir una óptima ingesta de proteínas, además de una buena dosis de vegetales y frutas, grasas buenas y carbohidratos”.
Ahora bien, las personas que padezcan de una enfermedad como diabetes, obesidad o hipertensión deben seguir de manera estricta las recomendaciones de los médicos y no dejar los tratamientos farmacológicos a menos de que haya una indicación puntual. “También deben continuar las dietas terapéuticas que hayan sido prescritas para cada condición y abstenerse de consumir complementos, vitaminas, malteadas o productos que sean promocionados como potenciadores del sistema inmunológico sin consultarlo con su médico o nutricionista tratante", complementa la especialista Becerra.
Cuidado en casa
Los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC por sus siglas en inglés) ha compartido consejos para tener en cuenta a la hora de cuidar en casa a un paciente de covid-19:
-Lavarse las manos con frecuencia (por lo menos cada dos horas) y usar soluciones de alcohol antes y después de: ir al baño; tocarse la cara o el pelo; tener contacto con objetos posiblemente contaminados; o después de haber manipulado alimentos crudos y cocidos.
-Desinfectar con frecuencia objetos y superficies tales como grifos, baños, mesas, cerraduras, celulares, gafas.
-Si hay una persona enferma en la familia, preferiblemente esta debe mantenerse aislada en su habitación y utilizar un baño independiente. De ser necesario usar espacios compartidos, el tapabocas es obligatorio, así como el distanciamiento y la desinfección permanente de objetos.
-La persona con covid-19 debe comer (o ser alimentada) en su habitación o separada de los otros miembros de la familia.
-No compartir platos, cubiertos, vasos ni botellas. En este caso, una opción es utilizar utensilios de plástico que deben ser desechados en una bolsa.
-Lavar los platos y cubiertos con guantes, utilizando abundante agua caliente y jabón.
-Desinfectar las superficies de preparación de alimentos con alcohol al 70 % o una dilución de hipoclorito de sodio (10 ml. por cada litro de agua).
La cifra
Se recomienda tomar 1,8 litros de agua al día.
Agua siempre:
Fiebre, mayor trabajo respiratorio, tos, respirar con la boca abierta, sensación de sed disminuida: todos estos son malestares propios de covid-19 que llevan al paciente a la deshidratación. Por eso, no hay que olvidarse de tomar agua y líquidos constantemente. La hidratación es importante tanto en periodos de normalidad como de enfermedad. Esto ayudará a que todos los órganos y células del cuerpo funcionen de manera óptima.
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