El embarazo puede ser un acontecimiento emocionante, abrumador y, en ocasiones, aterrador. Siga esta serie de recomendaciones para cuidar su salud mental durante esta etapa.
l contrario de algunas creencias, el embarazo no tiene una relación directa con la enfermedad mental, pues los trastornos mentales obedecen a otras variables como el contexto, la historia clínica y la genética. Sin embargo, durante el embarazo la mujer es más vulnerable emocionalmente debido a los cambios hormonales. “Más que presentar un trastorno mental, existe el riesgo de presentar algún tipo de alteración o malestar emocional mucho más pronunciado que si estuviera en un momento de la vida distinto y esto se debe a la sobrecarga emocional”, explica Nidia Preciado, psicóloga y profesora de Unisanitas.
Es importante tener en cuenta que durante el embarazo hay una vulnerabilidad emocional que es adaptativa. “La mujer tiene que desarrollar esta sensibilidad durante el embarazo y en el periodo de postparto porque es la única forma en la que va a poder percibir las mínimas señales de riesgo que tiene el neonato o que tiene ella durante el embarazo: como la sensibilidad a los movimientos del feto, los cambios de temperatura o los gemidos del bebé; todas las señales de riesgo son más perceptibles justamente porque la mujer está mucho más sensible”, comenta la profesora Preciado.
Para prevenir estas alteraciones, que pueden ser producto de esa vulnerabilidad e hipersensibilidad, lo ideal es cuidar la salud mental implementando algunos hábitos.
1. Mantener el contacto con sus seres queridos.
2. Hablar de lo que siente.
3. Cuidar el cuerpo eligiendo una alimentación sana y no se excediéndose con los antojos.
4. Hacer actividad física le hará bien a ella y a su bebé.
5. Establecer un horario de sueño regular.
6. Realizar las actividades de ocio favoritas.
7. Pedir ayuda cada vez que lo necesite.
Mantener el contacto con sus seres queridos es vital para afrontar el embarazo de la mejor manera.
Estrategias de afrontamiento adaptativas
Estas son herramientas fundamentales en la vida, y durante el embarazo juegan un papel principal a la hora de sobrellevar los cambios físicos y emocionales. Las estrategias de afrontamiento adaptativas son las habilidades que tenemos para resolver los problemas de la vida cotidiana; entre ellos está comunicarse de forma asertiva, recurrir al humor para aliviar algunas cargas, buscar soluciones con redes de apoyo y enfrentar de forma directa los problemas. En el caso de las mujeres embarazadas, estas estrategias les harán sentir más seguras para afrontar los retos de la maternidad.
En ese sentido, la depresión posparto no es el único trastorno que puede experimentar una madre: existe una serie de trastornos que pueden aparecer durante el embarazo y meses después del parto.
Baby blues: “Es una condición que experimentan las mujeres en la fase del postparto y es muy parecida a la depresión postparto pero no se configura como un trastorno o enfermedad mental”, indica Preciado. Esta condición incluye toda la experiencia emocional desagradable y se asocia a una percepción de incapacidad de atender las necesidades de su hijo, genera malestar, síntomas de depresión y ansiedad.
Depresión o ansiedad: La depresión y la ansiedad son los trastornos psiquiátricos más frecuentes durante el embarazo. Su prevalencia oscila entre el 4 y el 25 %. Tanto la ansiedad como la depresión se han relacionado con un mayor riesgo de preeclampsia y otras afecciones de alto riesgo.
Depresión posparto: Puede ocurrir en cualquier momento durante el primer año después de dar a luz y se relaciona con cambios hormonales, pero también con problemas económicos o de pareja, cambios en las relaciones sociales y preocupaciones sobre la maternidad. Entre un 10 y un 30 % de las mujeres presentan síntomas.
Trastorno de pánico posparto: Les sucede principalmente a las madres primerizas, hasta un 11 % de ellas, y sus síntomas pueden ser nerviosismo, ansiedad y ataques de pánico.
Trastorno por estrés postraumático: como el embarazo y el parto generan emociones intensas, los recuerdos sobre el suceso pueden provocar en la mujer problemas al socializar, desesperanza hacia el futuro y miedo a situaciones o lugares que evoquen el trauma. Las cifras oscilan entre el 3 y el 8 % de las mujeres durante y después del embarazo.
Trastorno de psicosis posparto: Se considera uno de los trastornos mentales postparto más severos. Sus síntomas pueden ser desde desorientación hasta graves alteraciones del comportamiento, alucinaciones y pérdida del sentido de la realidad. Afecta a una de cada mil mujeres aproximadamente.
Factores de riesgo
Antecedentes de depresión.
Falta de acompañamiento familiar
Ausencia de la pareja
Embarazo no deseado
Violencia intrafamiliar
Tenga en cuenta
El proceso del embarazo y la maternidad requieren acompañamiento profesional en salud mental porque este proceso involucra cambios importantes que a veces por desconocimiento generan más ansiedad. Cuando se cuenta con acompañamiento profesional durante el embarazo se reduce el riesgo de desarrollar un trastorno tras el nacimiento del bebé.
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