¿Cómo está preparando los alimentos de su hijo?

Explorar los diferentes métodos de cocción, teniendo en cuenta las porciones y los tiempos de cocción de cada producto, puede ser el camino para enseñarle a su hijo a comer de todo y sin perder los nutrientes.

or tradición o desconocimiento, los padres y cuidadores consideran que la única forma de cocinar los alimentos de su pequeño es al vapor, pues de lo contrario podrían perder los nutrientes. Sin embargo, existen otros tipos de cocción que también son saludables y permiten preparar platos divertidos, sabrosos y sin perder sus propiedades. 

Con la ayuda de la nutricionista Catalina Wills, de Eat Petit, y la chef Margarita Bernal, de Bienestar Colsanitas, les contamos cómo obtener alimentos en su punto perfecto de cocción, nutrición y sabor. 

Los alimentos y sus porciones

Los niños deben recibir alimentos de los cinco grupos: frutas, vegetales, carbohidratos, proteínas y grasas. De acuerdo con la edad y la talla del niño se pueden calcular las cantidades. Las porciones de los alimentos también aumentarán con el correspondiente tamaño de la mano. La fórmula es sencilla: 

Proteínas: una porción equivale a la palma de la mano del niño.
Harinas y granos: el tamaño de la mano cerrada en un puño.
Verduras: una porción equivalente a dos veces la mano abierta. 
Frutas: una porción igual al puño de la mano. 

Infografía por Ada Férnandez. Instagram: @adafernandez.
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Manipulación de alimentos:

De acuerdo con la FAO (Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura), estas son las recomendaciones para hacer una correcta manipulación de los alimentos. 

• Las hortalizas y las frutas frescas deben sumergirse en agua y se lavan a fondo antes de consumir o cocinar para eliminar impurezas.

• Disponga de un sitio para manipular, almacenar, limpiar y preparar ingredientes alimentarios crudos separados del sitio donde se expongan, manipulen y sirvan alimentos cocinados listos para el consumo.

• Descongelación: los pedazos grandes de carne o pollo deben descongelarse antes de la cocción. Jamás se debe volver a congelar un producto que ya ha sido descongelado.

• Los alimentos no deben recalentarse.

• Los utensilios utilizados para probar los alimentos deben lavarse inmediatamente después de cada uso.