La actriz, bailarina y cantante colombiana cuenta cómo hace para mantener una vida saludable y feliz.
s la chica del momento. Después de varias temporadas sigue siendo la gran estrella de Sin senos sí hay paraíso; interpreta a Manuelita Sáenz para TeleAntioquia y está presentando un monólogo musical que piensa llevar de gira por Estados Unidos. También se prepara para una nueva vida en Los Ángeles.
Carolina es bailarina, actriz y cantante, y muchas veces es todo eso al tiempo. Nelly Calle en Las hermanitas Calle, Lola Calvo en Celia o su reciente monólogo musical, Vida, para el Teatro Nacional, son prueba de que para ella ninguna de sus pasiones puede ir desligada de las demás.
Escuchar música (le gusta la llanera y la mexicana, como la de Chavela Vargas) y practicar danza son también fundamentales para sentirse bien. Al menos dos veces por semana, se pone pone los audífonos, elementos imprescindibles para hacer ejercicio cardiovascular, o se enlista en una clase de baile. “No soy de las que se interna en un gimnasio por horas, pero me gusta tener mi cuerpo fuerte y flexible para el trabajo y para la vida”.
Carolina es bailarina, actriz y cantante, y muchas veces es todo eso al tiempo. Sus diferentes papeles son prueba de que para ella ninguna de sus pasiones puede ir desligada de las demás”.
Hace año y medio dejó de comer carne y pollo y hoy se siente muy bien energéticamente.
“Soy católica y me gusta rezar e ir a misa, aunque no asumo la religión como algo impuesto ni castigador. Nací en una familia católica y la vida me ha llevado a descubrir lo bonito que es”. Cuando se trata de la piel, no es tan devota. Prefiere cambiar de marcas, porque asegura que cuando la piel se acostumbra a un producto en particular deja de tener el mismo resultado. Eso sí, de vez en cuando duerme con cristales de sábila en la cara. Su estilo personal lo define como “una mezcla tendencias”, se ha hecho experta quizás porque suele consumir muchas revistas de moda. Su lema: “elegante, cómoda y femenina”.
'
Dejar un comentario