A veces se presentan verdaderas emergencias capilares: caída, resequedad, caspa, daño químico o físico tras el exceso de secador, plancha, tintes o alisados.
Las enfermedades capilares (alopecia, caspa, dermatitis, esclerodermia, entre otras) pueden ser consecuencia de tratamientos mecánicos como la plancha y el secador o químicos, luego de aplicar tintes, keratinas y otros productos. También pueden ser el síntoma de problemas relacionados con la glándula tiroides, el sobrepeso, el estrés o algunas enfermedades autoinmunes. En estos casos, es recomendable consultar con un dermatólogo que determine las causas, haga su diagnóstico y diseñe una terapia.
Las enfermedades más comunes
La alopecia androgenética y otros tipos de caída del pelo son las enfermedades más comunes del cuero cabelludo. También es frecuente la dermatitis seborreica o caspa en diferentes grados de severidad, que se presenta como sequedad y rasquiña en el cuero cabelludo.
Alteraciones de la fibra capilar
Se presentan alteraciones como la tricorrexis nodosa, tricosquisis y tricoptilosis, condiciones que se evidencian en el pelo seco, sin brillo, con puntas abiertas y que se rompe fácilmente. Generalmente estos síntomas son causados por procesos químicos, como decoloraciones y alisados, o por procesos físicos, como secado y planchado frecuente del pelo.
Los productos químicos que más daño le hacen al pelo
Entre los productos más agresivos con el cuero cabelludo se encuentran las decoloraciones, keratinas o alisados, ya que alteran la estructura del tallo capilar. Esto no quiere decir que no se puedan usar o que una persona con el pelo tinturado no lo tenga sano. Lo importante es evitar el abuso y confiarle la tarea a profesionales que usen productos de calidad.
El estrés
Es uno de los factores que más afecta la salud capilar y puede causar alopecia areata y dermatitis seborreica. Algunas personas han reportado la caída abundante del pelo luego del contagio por Covid-19. Se cree que puede ser consecuencia del estrés producido por la infección.}
El uso frecuente de secadores
La alta temperatura, el planchado, peinar, cepillar o secar el pelo bruscamente daña la fibra capilar. Tampoco es recomendable hacer peinados con tracción excesiva, usar sujetadores o moñas en materiales que se enreden en el pelo y lo rompan.
Los dermatólogos tratan las enfermedades de la piel, el pelo y las uñas
Hay lugares especializados que ofrecen el servicio de terapeutas capilares, personas que llevan muchos años en el campo de la estética ornamental del pelo y que han sido capacitadas y entrenadas por dermatólogos para la aplicación de tratamientos. Los hombres y las mujeres pueden usar los mismos productos o terapias, ya que éstas no tienen que ver con el género sino con la necesidad específica de la piel y fibra capilar
Las alteraciones de la fibra capilar
Como consecuencia de daños físicos y químicos pueden mejorar con tratamientos especiales. Es aconsejable preparar el pelo para la realización de un procedimiento de decoloración o alisado, de manera que sufran el mínimo daño. El envejecimiento capilar se refleja en el aspecto y calidad del pelo. El cuero cabelludo dañado puede tratarse con terapias de ozono, nanoterapia, radiofrecuencia, entre otros procedimientos.
Para tener un pelo saludable hay que tener una alimentación adecuada, dormir bien y, en general, estar sano. Los problemas de salud hormonales, emocionales o metabólicos afectan la apariencia del pelo.
La rutina capilar recomendada
- Lavar con un champú acorde al tipo de pelo y estado de hidratación del cuero cabelludo.
- Usar acondicionador de medios a puntas, enjuagar con agua tibia y terminar con agua fría. No usar agua caliente.
- Secar el pelo sin frotar con una toalla seca y apretar suavemente para retirar el exceso de agua.
- Desenredar el pelo cuando esté húmedo desde las puntas hacia arriba, ojalá con un peine de dientes separados.
- Si es necesario, complementar con serums en las puntas.
- Una o dos veces por semana, de acuerdo a la necesidad, se pueden aplicar mascarillas de tratamiento.
- Preferiblemente dejar secar el pelo al natural o usar el secador en temperatura baja. Antes de usar secadores, planchas o rizadores, es importante usar previamente protectores térmicos para minimizar el daño.
*Periodista, productora y cofundadora de Relatto. Con la asesoría de Mónica Rocío Paredes Barahona, cirujana y dermatóloga de Happy Hair Clinic, centro especializado en el cuidado de la fibra capilar y del cuero cabelludo.
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